Como trabajo personal me he recreado en la infancia, ese momento de nuestras vidas en el que cada uno nos dejamos llevar por todo aquello relacionado con la magia, mundos oníricos donde todo es posible y no hay límites para soñar. Para ello he escogido hacer un cuento ilustrado, eligiendo entre los clásicos de Hans Christian Andersen La Reina de las Nieves.
La principal idea del por qué de esta elección es porque es de las pocas veces que una mujer es la que va en busca de su amigo, ella es la heroína y no la dama en apuros, algo que me llamó la atención y quise recalcar.
He querido realizarlo todo con un estilo muy simple y tierno que da ese toque infantil que tanto atrae a los más pequeños.
La técnica empleada es el rotulador a base de alcohol, una forma tradicional que lleva la ilustración y que nos ofrece un acabado mate y profesional.
